Ninguno de los servicios que se ofrecen sustituye por completo la función, responsabilidad y trabajo del abogado profesional que me contrate, estoy aquí para ayudarte a que tus trabajos salgan adelante y no colapsen tu despacho ni tu vida, no para reemplazarte.
El profesional que me contrate es quien conoce al cliente y sabe lo que éste requiere y el caso concreto necesita, sólo tiene que hacérmelo llegar a mí, yo bajo tus órdenes e intereses redactaré o realizaré el trabajo solicitado.
El profesional que realiza el encargo deberá siempre asegurarse de que el trabajo solicitado reúna las condiciones y esté redactado bajo las instrucciones requeridas.
El documento solicitado será redactado en formato.doc para que se pueda corregir o matizar a tu gusto.
No se cobra hasta la entrega del trabajo solicitado.
Máxima discreción con los datos personales de tus clientes. Se realiza un contrato de privacidad y se compromete a destruir la información una vez realizado el encargo.
Gracias a las nuevas tecnologías no es necesario el desplazamiento para contratar mis servicios, podemos comunicarnos durante todo el proceso vía e-mail, por teléfono, WhatsApp, etc.
Cualquier duda que surja antes, durante o después del proceso de colaboración puede ser comentada y se resolverá en el menor plazo posible.